miércoles, 1 de septiembre de 2021

FRÍAMENTE CALCULADO

Edison Cavani no fue el único futbolista de la Premier League cuya convocatoria fue cancelada por su federación. Nada menos que los nueve brasileños que brillan en Inglaterra terminaron siendo exonerados de la citación por la Confederación Brasileña de Fútbol. Entre otros jugadores que se quedaron, puede destacarse al paraguayo Miguel Almirón, figura clave del guaraní, que defiende a Newcastle United. Entre tanto los cuatro argentinos que volaron a Buenos Aires, lo hicieron dentro de un convenio sellado entre la A.F.A. y los clubes correspondientes que, básicamente, incluía el hecho de que la cuaterna de albicelestes podría defender a la Argentina en sólo dos de los tres partidos de la triple fecha de Eliminatorias que comienza esta semana. CUARENTENA. Existe un denominador común que abraza tanto las cancelaciones como esas convocatorias condicionadas de los futbolistas argentinos y el mismo está directamente emparentado con la situación más que especial que vive el planeta tras la explosión de la pandemia del Covid 19 registrada en marzo de 2020. La cuarentena de 10 días que hoy conntinúa exigiendo el gobierno británico para quienes ingresan al Reino Unido procedentes de países con el semáforo en rojo, como se les denomina en este país, es decir aquellos donde la pandemia, al menos según el leal parecer y entender del gobierno de Boris Johnson y del personal científico que lo asesora, continúa pegando duro y resulta más que molesta para el ciudadano común, ya que lo priva, por ese período, de desarrollar su actividad normal: no puede hacer nada, está preso, recluido en un hotel especialmente acondicionado para personas en esta situación. Si el confinamiento es molesto para todo quien lo sufre, resulta directamente "venenoso", "mortal", para un deportista de alta competencia porque por más que se le faciliten los elementos para que entrene por su cuenta, no se necesita ser un especialista en la materia para darse cuenta que esta actividad alternativa no se compara ni de lejos a un entrenamiento en forma junto a sus compañeros de club y a las órdenes del preparador físico y del entrenador del equipo. Siguiendo estos parámetros absolutamente lógicos e irrebatibles, puede concluirse que el deportista en cuestión recién estará listo para el siguiente desafío profesional, aproximadamente en unos 18 a 20 días luego de su regreso al país donde desarrolla su actividad. TARDE.Edison Cavani es un futbolista de élite y como tal sufre anímica y físicamente por la situación especial que impone la pademia, así como termina pagando cara su propia imprevisión, de acuerdo a lo que sigue. El salteño es un fanático y estudioso del campo y lo pregona a los cuatro vientos. Y su campo, de tanto que le apasiona, a veces le hace zancadillas, como la de quedarse en Uruguay más de la cuenta al final de sus vacaciones anuales. Años atrás tuvo un choque con su antiguo club, el París Saint Germain, precisamente por llegar tarde a la pre-temporada que el parisien llevaba a cabo en la Costa del Sol. Esta vez "El Matador", eliminado con Uruguay de la Copa América el 3 de julio pasado, arribó al aeropuerto de Heathrow cuando colegas suyos que habían disputado el día 11 de julio la final de dicho torneo, ya habían dejado la cuarentena y se integraban a los entrenamientos colectivos de sus equipos. Terminado el confinamiento y su entrenamiento en solitario, Cavani se unió finalmente a las prácticas colectivas de Manchester United. LEJOS. Debido a ese considerable retraso, el uruguayo recién tuvo sus primeros minutos en esta Premier 2021/2022, el domingo 29 de agosto y en los 40 minutos que jugó se vió a las claras que estaba lejos de su mejor forma física y futbolística. Se limitó a moverse en un espacio reducido en el centro de su ataque y no se le vió hacer sus clásicas diagonales picando hacia los extremos para desmarcarse, como es su característica. En ningún momento bajó para ayudar en la marca o simplemente correr a un rival para "entregárselo" a un compañero de mediocampo o de defensa, acción que configura otro de sus sellos inconfundibles adentro de una cancha, ya sea defendiendo a su club o a la selección uruguaya. Como va dicho al comienzo de esta nota, ni siquiera viajaron para esta triple fecha de Eliminatorias los nueve futbolistas brasileños de Premier, pese a que ellos arribaron a Inglaterra en tiempo y forma, aún habiendo disputado la final de la Copa América el día 11 de julio, habiendo estado por lo tanto, al menos presuntamente, en condiciones físicas y futbolísticas sensiblemente mejores que las que exhibió Edison Cavani en la visita de Manchester United al "Molineaux" de Wolverhampton Wanderers. "El Secreto de sus Ojos" a veces puede ser no tanto el ver, sino el saber ver. El de Salto no estaba bien porque retrasó el regreso tras sus vacaciones y porque, como directa consecuencia de ello la cuarentena, dañina, "venenosa", artera, le quedó prácticamente montada a grupas del inicio de la Premier League. LESION. Si aún con todo ese viento en contra, entiéndase un estado físico inadecuado, otra cuarentena tras un nuevo regreso a Inglaterra y dos viajes transoceánicos de 14 horas cada uno, más el traslado Montevideo-Lima-Montevideo, el jugador igual viajaba, su rendimiento iba a estar realmente lejos del habitual, como ya se vió en los 40 minutos que disputó el domingo 29 ante los "Wolves". Aparte de lo anterior siempre yace en las sombras el inminente riesgo de una lesión muscular que lo dejaría sin actividad tanto en el Manchester United como en la "celeste", lo cual en este último caso se extendería por el resto del año. A un lado queda la polémica que absurdamente se ha inventado sobre cuál de las instancias es más trascendente, es decir si ésta de setiembre o la próxima triple fecha de octubre, más allá de que parece obviarse la realidad de que Uruguay necesita por igual todos o al menos la mayoría de los puntos en disputa. Sin embargo parece muy claro que haber contado con Cavani ahora, en las condiciones en las que llegaba, podría haber sido equivalente a no tenerlo y, lo que es aún peor, a perderlo también para la nueva triple fecha de octubre. Con esas cartas a la vista no puede sorprender a nadie, más allá de que haya sido motivo de discusiones encendidas, que tras un diálogo sensato y honesto, el entrenador de Uruguay y el futbolista hayan llegado, de común acuerdo, a la conclusión, fríamente calculada, de que no era atinado que esta vez Edison Cavani viajara a ponerse a las órdenes del Cuerpo Técnico para la triple fecha de Eliminatorias que se avecina.