martes, 30 de julio de 2013
Mueve Suárez
Arsene Wenger se ha quedado de piedra. El francés está más estático que la propia Tour Eiffel. Si le preguntan contesta que ni él ni su Arsenal están cerca de fichar a Luis Suárez ni a ningún futbolista top. Mira, escucha,espera, pero no actúa. Algunos dicen que aguarda el desenlace de la novela "Bale", estrechamente vinculada a la llamada "Saga Suárez". Es que si a Real Madrid no le da la nafta para quedarse con el afamado galés, ya le ha avisado a Pere Guardiola, hermano de Pep y representante del uruguayo, que irá por el de Anfield Road.
En cambio otros, hoy dueños de una nueva corriente de pensamiento, aseguran que el espigado entrenador galo directamente no va a actuar. Ellos afirman que Monsieur Wenger "se aguantará en el molde". No dirá nada más y, lo que es más sorprendente, no mejorará la oferta por la estrella salteña. Desinterés? Rendición? Resignación? No, la nueva teoría nacida hoy no admite esos términos aplicados al francés con relación a la ya famosa "Saga Suárez".
Arsene Wenger tiene asesores, gente especializada, profesionales que lo rodean y lo aconsejan en este tema y en tantos otros. Y ese es su segundo equipo, el que se mueve afuera de la cancha del Estadio de Emirates. Esa gente no para, no tiene pausas ni respiro, así que le habrían aconsejado a su cliente mantener una actitud pasiva en el "caso Suárez". Dicen que el secreto está escondido dentro de la "Cláusula Gatillo" del contrato del uruguayo con Liverpool, la misma que Arsenal accionó cuando la semana pasada ofreció el mínimo requerido para empezar a conversar: 40 millones y una libras.
Aparentemente el disparo con el que los "Gunners" pusieron en vigencia dicha cláusula, fue bastante más potente de lo que todos pensaron. No, claro, Liverpool insiste enfáticamente que el ya famoso párrafo solamente le da derecho a Suárez a ser informado por su club de que alguien ha depositado sobre la mesa una oferta por sus servicios. Los "Reds" ni siquiera reconocen que la activación de la cláusula habilite a su estrella para al menos negociar oficialmente con el club interesado.
El gran tema es que los asesores de Arsene Wenger no están de acuerdo con esa tesis y además coinciden en su manera de pensar con los consejeros de Luis Suárez. Así resulta que ambos equipos técnicos enfatizan que esa "Cláusula Gatillo", una vez accionada por el aspirante a comprador, habilita al jugador no ya solamente a negociar con la parte compradora, en este caso Arsenal, sino nada más ni nada menos que a dejar su actual club, Liverpool. En un hipotético juicio, el "caso Cavani" saltaría como un resorte al estrado para declarar a favor de Arsenal y de Luis Suárez. Está claro que París Saint Germain se llevó al otro salteño simplemente pagando el valor de su cláusula de recesión. Y ese valor es el que Wenger y Suárez le dan a la cláusula inserta en el contrato del uruguayo con Liverpool. Recisión, palabra clave. Para Liverpool no es aplicable en el "caso Suárez". Para Wenger y para el propio futbolista, ese es el verdadero valor de la cláusula, siempre y cuando sea accionada por la parte compradora, como efectivamente lo fue la semana pasada.
Pero falta algo. Algo que hasta ahora Luis Suárez se ha negado a concretar, pero que puede ser el próximo movimiento en esta auténtica partida de ajedrez. Para rematar a la víctima el uruguayo debe efectuar un segundo disparo, que complemente al que ya hicieron los "Gunners". Si Arsenal y el futbolista pretenden que el accionamiento de esa "Cláusula Gatillo" se haga realmente efectivo, es requisito imprescindible que Luis Suárez solicite formalmente a Liverpool su transferencia. Mediante ese acto, en apariencia sencillo, el club de Anfield se vería definitivamente obligado a vender a su jugador estrella.
Claro que también como consecuencia de dicho pedido formal, Suárez perdería el derecho a cobrar el porcentaje de su pase, cosa que no sucedería en el caso de una transferencia que emergiera como consecuencia del acuerdo espontáneo de todas las partes...incluida la vendedora, el Liverpool FC.
Es que don Luis quiere "el oro y el moro", no se muestra inclinado a renunciar a nada. Parece que al goleador se le escapa que en estas negociaciones intrincadas en las que una de las partes -Liverpool- se atrinchera armada hasta los dientes, dispuesta a pelear hasta lo último para no perder a su jugador clave, más de uno tiene que ceder algo. O seguramente mucho, quién puede negarlo?
Wenger ya sufrió en carne propia todo el proceso que actualmente tortura a los "Reds". Y fue por partida doble y con nombres propios. Sabe demasiado bien que al final, por más que se quiera y se luche, resulta imposible mantener en el club a futbolistas que dejaron de sentirse a gusto, cómodos. Después de mucho drama y frustración, Cesc Fábregas terminó al final en su Barcelona añorado. Robin Van Persie fue el último goleador de la Premier League defendiendo a...Manchester United. El holandés quería ganar algo alguna vez en el fútbol inglés y al final lo consiguió.
Es tiempo de revancha para don Arsene. Por fin puede hacerle a otros lo que otros le hicieron a él. Pero junto con su club necesitan ahora tener paciencia, mucha paciencia. Así que simplemente se han dedicado a campanearlo todo, a aguardar una evolución natural de los acontecimientos, a esperar que la manzana caiga sóla del árbol.
lunes, 29 de julio de 2013
Anochecer de un día agitado
Lunes de novela. Se termina julio pero los teleteatros están en plena ebullición.
Bueno, son las reglas del juego de un período de pases muy especial para algunos elegidos del aula del Maestro.
Al comienzo del día todo pintaba para que la "Saga Suárez-Bale-Real Madrid-Liverpool-Arsenal" se robara toda la audiencia. La inminencia del final flotaba junto con los nubarrones del hoy encapotado cielo británico. Los "merengues" han sufrido -y mucho- a Mr. Daniel Levy, el mandamás del Tottenham Hotspur, cuando poco tiempo atrás tuvieron que poner toda la carne en el asador para llevarse al mediocampista croata Luka Modric. Ahora intentaron ofrecer al portugués Favio Coentrao y al argentino Angel Di María, además de 40 millones de libras por el encumbrado Gareth Bale, galardonado como el mejor jugador de la última Premier League.
Florentino Pérez, el super hombre merengue, sabía la respuesta de antemano: "No corre amigazo, sólo cash, mucho cash y muy pesado: 84 millones de libras". Son los mismos que, de ser abonados por el gigante ibérico en las próximas horas, harán volar como una pluma el liderazgo de Edison Cavani como el futbolista más caro hasta ahora en el presente período de pases europeo.
Y mientras en eso están, el zorro de don Florentino ya le avisó a Pere Guardiola, el hermano de Pep, el mismo que representa a Luis Suarez, que si esta vez no puede doblar a Daniel Levy, irá por el "Lucho" a como dé lugar. Claro, es uno o el otro, los medios ingleses aclaran muy enfáticamente que la "pasta" hispana no da para los dos, bueno fuera...
Y cuando parecía que la jornada se conformaba con semejante hormiguero, resultó que el "Cholo" Simeone, el mismo que en sus buenas épocas se jactaba de jugar con el cuchillo entre los dientes, quiere al popular "Mota" Gargano para que aplique idénticos métodos defendiendo al Atlético Madrid. Dicen las malas lenguas que el "Cholo" no perdió el tiempo y ya lo pidió a los directivos del Calderon, mientras tomaba el sol a orillas del Manzanares.
En medio de semejante revuelo y casi como de la nada, a la hora del té subió al tapete el nombre de Diego Lugano. Así se supo que en enero último, cuando el París Saint Germain prácticamente le plantó en su cara los papeles del préstamo inminente, el Málaga tuvo que pelear a muerte por el "canario". Su adversario en aquel momento fue el Queens Park Rangers, por entonces aún en la Premier League, ansioso de reforzar una defensa frágil, tanto que al final el descenso terminó tragándoselo junto con sus ilusiones de clasificar a la Europa League, objetivo inicial de los del oeste de Londres, cuando a principios de la temporada 2012-2013 se habían reforzado casi inusualmente para un club de categoría media-baja.
Como quedó claro, el andaluz se llevó al capitán celeste aunque luego, al final de la temporada, lo retornó al campeón francés. Hoy, justo a la hora del té, resurgió de entre las cenizas el QPR. Parece que Harry Redknapp, de reconocida trayectoria en el fútbol de estas tierras y sorpresivamente marginado por la Football Asociation a la hora de designar el técnico de la selección inglesa, no está dispuesto a arriesgar el objetivo del retorno inmediato a la Premier y como medida imprescindible, está enfrascado de lleno en reforzar su defensa. El carismático Harry quiere a un experiente que ordene y mande todo por ahí atrás.
Y entonces, para coronar la jornada, apareció en el menú la "información a la parisien". Leonardo, quien ya se va pero no todavía, anunciaba la inminente salida del PSG de Diego Lugano. La fuente daba el nombre del interesado: sorpresivamente era otro. Según Europe Mercato, en francés y con el escudo del PSG al tope del informe, el líder celeste estaría sellando el martes su vinculación con el West Bromwich Albion de la Premier League, un club que se situó en una honrosa posición de media tabla en la última temporada.
Fue la frutilla sobre la torta a la hora del té...en el anochecer de un día agitado.
Bueno, son las reglas del juego de un período de pases muy especial para algunos elegidos del aula del Maestro.
Al comienzo del día todo pintaba para que la "Saga Suárez-Bale-Real Madrid-Liverpool-Arsenal" se robara toda la audiencia. La inminencia del final flotaba junto con los nubarrones del hoy encapotado cielo británico. Los "merengues" han sufrido -y mucho- a Mr. Daniel Levy, el mandamás del Tottenham Hotspur, cuando poco tiempo atrás tuvieron que poner toda la carne en el asador para llevarse al mediocampista croata Luka Modric. Ahora intentaron ofrecer al portugués Favio Coentrao y al argentino Angel Di María, además de 40 millones de libras por el encumbrado Gareth Bale, galardonado como el mejor jugador de la última Premier League.
Florentino Pérez, el super hombre merengue, sabía la respuesta de antemano: "No corre amigazo, sólo cash, mucho cash y muy pesado: 84 millones de libras". Son los mismos que, de ser abonados por el gigante ibérico en las próximas horas, harán volar como una pluma el liderazgo de Edison Cavani como el futbolista más caro hasta ahora en el presente período de pases europeo.
Y mientras en eso están, el zorro de don Florentino ya le avisó a Pere Guardiola, el hermano de Pep, el mismo que representa a Luis Suarez, que si esta vez no puede doblar a Daniel Levy, irá por el "Lucho" a como dé lugar. Claro, es uno o el otro, los medios ingleses aclaran muy enfáticamente que la "pasta" hispana no da para los dos, bueno fuera...
Y cuando parecía que la jornada se conformaba con semejante hormiguero, resultó que el "Cholo" Simeone, el mismo que en sus buenas épocas se jactaba de jugar con el cuchillo entre los dientes, quiere al popular "Mota" Gargano para que aplique idénticos métodos defendiendo al Atlético Madrid. Dicen las malas lenguas que el "Cholo" no perdió el tiempo y ya lo pidió a los directivos del Calderon, mientras tomaba el sol a orillas del Manzanares.
En medio de semejante revuelo y casi como de la nada, a la hora del té subió al tapete el nombre de Diego Lugano. Así se supo que en enero último, cuando el París Saint Germain prácticamente le plantó en su cara los papeles del préstamo inminente, el Málaga tuvo que pelear a muerte por el "canario". Su adversario en aquel momento fue el Queens Park Rangers, por entonces aún en la Premier League, ansioso de reforzar una defensa frágil, tanto que al final el descenso terminó tragándoselo junto con sus ilusiones de clasificar a la Europa League, objetivo inicial de los del oeste de Londres, cuando a principios de la temporada 2012-2013 se habían reforzado casi inusualmente para un club de categoría media-baja.
Como quedó claro, el andaluz se llevó al capitán celeste aunque luego, al final de la temporada, lo retornó al campeón francés. Hoy, justo a la hora del té, resurgió de entre las cenizas el QPR. Parece que Harry Redknapp, de reconocida trayectoria en el fútbol de estas tierras y sorpresivamente marginado por la Football Asociation a la hora de designar el técnico de la selección inglesa, no está dispuesto a arriesgar el objetivo del retorno inmediato a la Premier y como medida imprescindible, está enfrascado de lleno en reforzar su defensa. El carismático Harry quiere a un experiente que ordene y mande todo por ahí atrás.
Y entonces, para coronar la jornada, apareció en el menú la "información a la parisien". Leonardo, quien ya se va pero no todavía, anunciaba la inminente salida del PSG de Diego Lugano. La fuente daba el nombre del interesado: sorpresivamente era otro. Según Europe Mercato, en francés y con el escudo del PSG al tope del informe, el líder celeste estaría sellando el martes su vinculación con el West Bromwich Albion de la Premier League, un club que se situó en una honrosa posición de media tabla en la última temporada.
Fue la frutilla sobre la torta a la hora del té...en el anochecer de un día agitado.
jueves, 25 de julio de 2013
Cañonazos sobre Anfield
Arsene Wenger escaló la rampa que rodea al Estadio de Emirates, al norte de Londres, puso la bala en uno de los cañones que allí descansan, apuntó al norte del país y volvió a disparar. Esta vez el sacudón del impacto metió pavor en Anfield Road y alrededores. Mucho miedo.
Es que la cláusula gatillo que alcanzaron los "Gunners", hizo que el cañonazo fuera mucho más terrible de lo previsible. Miedo, pavor, temblor. Los "Reds" vieron, casi sin darse cuenta, cómo se accionaban automáticamente los mecanismos de autodefensa de su ejército. Con los ya épicos 40.000.001 millones de libras, los mismos que provocaron que el dueño de Liverpool twiteara en su cuenta "Pero qué es lo que están fumando en Emirates?", los de la capital liberaron mucho más que las conversaciones con Luis Suárez. Sabuesos de experiencia reconocida, se lanzaron vorazmente detrás de su presa. Por supuesto que sabían perfectamente que esa suma no era ni por asomo suficiente para quedarse desde ya con el codiciado uruguayo. En su capa exterior, repleta de apariencia, la oferta conseguía que Liverpool al menos informara oficialmente a su futbolista estrella que alguien había ofertado por él. Aparentemente, porque esto aún se discute hoy jueves 25 de julio en Londres y aledaños, el haber apretado el gatillo también habría liberado las conversaciones oficiales entre el futbolista y la parte compradora. Esas dos cosas eran las que venían envueltas en el humo de lo que estaban fumando en Emirates.
Pero lo peor estaba escondido muy adentro de la pesada bala que Monsieur Wenger introdujo en la boca del cañón. El bombazo esparció el clima de pase por todas partes: Anfield, Emirates, prensa, hinchadas, Súarez...Ahora la mente y el espíritu del principal protagonista de la saga, están definitivamente embriagados por lo que muchos señalan como la inminencia de una nueva escala en la exitosa carrera del "actor" oriental. Sí, para esos la novela se aproxima a su culminación y para la producción del capítulo final a los "Gunners" les bastará con una relativa mejora de la última oferta, pero sin llegar ni por asomo a lo que París Saint Germain pagó por Edison Cavani, lo cual es pretensión declarada de Brendan Rodgers, técnico de Liverpool. En la visión de ellos la saga "Suárez" amenaza con dejar de ser la cita obligada de cada día en Sky Sports News 24 horas. Están convencidos que las portadas de The Sun, del Daily Mail, del Express Sports, del Telegraph o del The Guardian, les resultarán desabridas por completo. Esos son los que ven a Luis enfrentando al Galatasaray de Fernando Muslera, a fines de agosto en el tradicional torneo "Emirates". O al laureado Porto donde recientemente brillaran varios compatriotas del protagonista estelar.
La última táctica de Arsene Wenger arrasa con cualquiera que el francés haya podido emplear durante su longeva estadía en Arsenal. Alborotó el ambiente. Creó el clima de pase imprescindible para que a Liverpool se le haga tarea imposible mantener a Luis Suárez en sus filas. Claro, podrá conservar al espectro del salteño, pero no a la estrella que rescató al club de la zona de descenso y lo catapultó en la tabla de la Premier tan arriba como puede hacerlo un sólo futbolista en un deporte colectivo por escencia y por raíz.
Tendrá éxito Arsen...al Wenger? Logrará su objetivo? Quebrará la resistencia de los "Reds"?
"De aquí en más espero que Suárez recuerde el apoyo incondicional que ha recibido siempre de todos nosotros: los fans, el técnico anterior, yo mismo, la cúpula del club, todos lo arropamos como a un hijo y lo apoyamos sin dudar en cada uno de los episodios que le tocó vivir en el club". Palabras de Brendan Rodgers, entrenador de Liverpool. También palabras de cada uno de los hinchas del club de Anfield, de sus dueños, de sus allegados, de todos los que tienen que ver con los "Reds".
Palabras de miedo, de aprehensión...de pavor. Y lo peor es que si Arsenal no se para en los pedales con una oferta que arrase con todo, todavía está Real Madrid agazapado, esperando, al asecho...
Es que la cláusula gatillo que alcanzaron los "Gunners", hizo que el cañonazo fuera mucho más terrible de lo previsible. Miedo, pavor, temblor. Los "Reds" vieron, casi sin darse cuenta, cómo se accionaban automáticamente los mecanismos de autodefensa de su ejército. Con los ya épicos 40.000.001 millones de libras, los mismos que provocaron que el dueño de Liverpool twiteara en su cuenta "Pero qué es lo que están fumando en Emirates?", los de la capital liberaron mucho más que las conversaciones con Luis Suárez. Sabuesos de experiencia reconocida, se lanzaron vorazmente detrás de su presa. Por supuesto que sabían perfectamente que esa suma no era ni por asomo suficiente para quedarse desde ya con el codiciado uruguayo. En su capa exterior, repleta de apariencia, la oferta conseguía que Liverpool al menos informara oficialmente a su futbolista estrella que alguien había ofertado por él. Aparentemente, porque esto aún se discute hoy jueves 25 de julio en Londres y aledaños, el haber apretado el gatillo también habría liberado las conversaciones oficiales entre el futbolista y la parte compradora. Esas dos cosas eran las que venían envueltas en el humo de lo que estaban fumando en Emirates.
Pero lo peor estaba escondido muy adentro de la pesada bala que Monsieur Wenger introdujo en la boca del cañón. El bombazo esparció el clima de pase por todas partes: Anfield, Emirates, prensa, hinchadas, Súarez...Ahora la mente y el espíritu del principal protagonista de la saga, están definitivamente embriagados por lo que muchos señalan como la inminencia de una nueva escala en la exitosa carrera del "actor" oriental. Sí, para esos la novela se aproxima a su culminación y para la producción del capítulo final a los "Gunners" les bastará con una relativa mejora de la última oferta, pero sin llegar ni por asomo a lo que París Saint Germain pagó por Edison Cavani, lo cual es pretensión declarada de Brendan Rodgers, técnico de Liverpool. En la visión de ellos la saga "Suárez" amenaza con dejar de ser la cita obligada de cada día en Sky Sports News 24 horas. Están convencidos que las portadas de The Sun, del Daily Mail, del Express Sports, del Telegraph o del The Guardian, les resultarán desabridas por completo. Esos son los que ven a Luis enfrentando al Galatasaray de Fernando Muslera, a fines de agosto en el tradicional torneo "Emirates". O al laureado Porto donde recientemente brillaran varios compatriotas del protagonista estelar.
La última táctica de Arsene Wenger arrasa con cualquiera que el francés haya podido emplear durante su longeva estadía en Arsenal. Alborotó el ambiente. Creó el clima de pase imprescindible para que a Liverpool se le haga tarea imposible mantener a Luis Suárez en sus filas. Claro, podrá conservar al espectro del salteño, pero no a la estrella que rescató al club de la zona de descenso y lo catapultó en la tabla de la Premier tan arriba como puede hacerlo un sólo futbolista en un deporte colectivo por escencia y por raíz.
Tendrá éxito Arsen...al Wenger? Logrará su objetivo? Quebrará la resistencia de los "Reds"?
"De aquí en más espero que Suárez recuerde el apoyo incondicional que ha recibido siempre de todos nosotros: los fans, el técnico anterior, yo mismo, la cúpula del club, todos lo arropamos como a un hijo y lo apoyamos sin dudar en cada uno de los episodios que le tocó vivir en el club". Palabras de Brendan Rodgers, entrenador de Liverpool. También palabras de cada uno de los hinchas del club de Anfield, de sus dueños, de sus allegados, de todos los que tienen que ver con los "Reds".
Palabras de miedo, de aprehensión...de pavor. Y lo peor es que si Arsenal no se para en los pedales con una oferta que arrase con todo, todavía está Real Madrid agazapado, esperando, al asecho...
martes, 23 de julio de 2013
Cantá la justa Brendan
En el "monito" de 5 contra 5 sus compañeros son Steven Gerrard, José Enrique, Glenn Johnson y Stewart Downing. Aplaude frenéticamente cuando los pases rápidos dejan a los rivales tuteándose con el ridículo. Pasan a la cancha grande y entonces su entusiasmo crece más aún. Sacude los guantes del nuevo arquero Simon Mignolet con un despiadado remate. Enseguida se tira a los pies de Martin Skrtel como si tuviera que recuperar la última pelota de su vida. Para terminar, una gran rociada a Oussama Assaidi porque no le pasa la bola cuando él, Luis Suárez, tenía todo para definir.
Dominic King, enviado especial de The Daily Mail a Melbourne comenta entonces que "este (Lucho Suárez) no era un jugador que estaba tres semanas atrasado en su preparación física con relación a sus compañeros. Se pasó los 90 minutos que duró la práctica escabulléndose y practicando sus habituales diabluras. Cuando Rodgers hizo sonar el silbato final, se dejó caer al piso completamente extenuado después de haberlo dado todo, como siempre".
Será por eso que el técnico termina declarando que "Ha estado muy bueno verlo de nuevo, he estado esperando ansiosamente este momento".
El periodista afirma con absoluta sensatez que "a la vista de lo que significa Luis Suárez, no es para nada descabellado pensar que un club pueda aparecer con una enorme oferta para que el futbolista cambie de paisaje, pero también tenemos que dudar si Arsenal puede mostrar más de 50 millones de libras para al menos llamar la atención de Liverpool. Y lo que Real Madrid pretende hacer, todavía permanece en la nebulosa".
El entrenador aparece firme en la nueva posición asumida el jueves último: "Suárez no cuesta menos que Cavani, de modo que quien lo pretenda deberá poner sobre la mesa 54 millones de libras". Luego, ya en Melbourne, Rodgers siguió parado en los pedales y dejó bien claro que seguirá librando una auténtica batalla para quedarse con Luis Suárez y que ningún futbolista está autorizado a dictarle su agenda.
Claro que detrás de esta fachada visible y audible que representa el entrenador, King, el enviado a Melbourne por el Daily Mail, confiesa casi en un susurro que "los representantes de Arsenal permanecían el lunes en negociaciones con los de Liverpool con miras de oficializar una nueva oferta por el goleador, esta vez de 40 millones de libras.
Apareciendo por sorpresa en el salón de juegos del hotel de Melbourne, lo primero que se ve es a Luis Suárez riéndose y bromeando con sus compañeros. "Yo lo miro y no me llevo precisamente la impresión de estar viendo a un futbolista que esté a disgusto acá en Australia", dice King en una parte de su extensa nota.
"Esto es algo que controlaremos. La situación no será manejada por el jugador, soy muy fuerte en cuanto a hacer respetar los valores de este club, dejar en claro dónde estamos y cómo operamos", agrega Rodgers.
"Yo manejo este club, no Luis Suárez", es el rimbombante título de la página 84 del Daily Mail del martes 23 de julio de 2013.
En serio Brendan? Daaaale, cantá la justa please.
Dominic King, enviado especial de The Daily Mail a Melbourne comenta entonces que "este (Lucho Suárez) no era un jugador que estaba tres semanas atrasado en su preparación física con relación a sus compañeros. Se pasó los 90 minutos que duró la práctica escabulléndose y practicando sus habituales diabluras. Cuando Rodgers hizo sonar el silbato final, se dejó caer al piso completamente extenuado después de haberlo dado todo, como siempre".
Será por eso que el técnico termina declarando que "Ha estado muy bueno verlo de nuevo, he estado esperando ansiosamente este momento".
El periodista afirma con absoluta sensatez que "a la vista de lo que significa Luis Suárez, no es para nada descabellado pensar que un club pueda aparecer con una enorme oferta para que el futbolista cambie de paisaje, pero también tenemos que dudar si Arsenal puede mostrar más de 50 millones de libras para al menos llamar la atención de Liverpool. Y lo que Real Madrid pretende hacer, todavía permanece en la nebulosa".
El entrenador aparece firme en la nueva posición asumida el jueves último: "Suárez no cuesta menos que Cavani, de modo que quien lo pretenda deberá poner sobre la mesa 54 millones de libras". Luego, ya en Melbourne, Rodgers siguió parado en los pedales y dejó bien claro que seguirá librando una auténtica batalla para quedarse con Luis Suárez y que ningún futbolista está autorizado a dictarle su agenda.
Claro que detrás de esta fachada visible y audible que representa el entrenador, King, el enviado a Melbourne por el Daily Mail, confiesa casi en un susurro que "los representantes de Arsenal permanecían el lunes en negociaciones con los de Liverpool con miras de oficializar una nueva oferta por el goleador, esta vez de 40 millones de libras.
Apareciendo por sorpresa en el salón de juegos del hotel de Melbourne, lo primero que se ve es a Luis Suárez riéndose y bromeando con sus compañeros. "Yo lo miro y no me llevo precisamente la impresión de estar viendo a un futbolista que esté a disgusto acá en Australia", dice King en una parte de su extensa nota.
"Esto es algo que controlaremos. La situación no será manejada por el jugador, soy muy fuerte en cuanto a hacer respetar los valores de este club, dejar en claro dónde estamos y cómo operamos", agrega Rodgers.
"Yo manejo este club, no Luis Suárez", es el rimbombante título de la página 84 del Daily Mail del martes 23 de julio de 2013.
En serio Brendan? Daaaale, cantá la justa please.
lunes, 15 de julio de 2013
Las balas de Wenger
"Mr. Wenger para esta temporada usted dispone de 70 millones de libras para nuevas incorporaciones. El club no va a apostar más a juveniles como hizo hasta ahora, siguiendo su anterior línea de trabajo. Arsenal necesita títulos, los mismos que no consigue desde hace muchos años y solamente podremos obtenerlos si traemos futbolistas de comprobada categoría, jugadores top. Eso sí, le rogamos que compre bien, no podemos darnos el lujo de cometer fallas".
Nueva temporada, nueva política para los "Gunners". La determinación es verídica. La suma es el cheque que está guardado en uno de los cajones del despacho de Arsene Wenger en la sede de Emiratos, al norte de Londres. Las palabras son inventadas, pero cualquier similitud de ellas con la realidad, NO es mera coincidencia. El legendario técnico francés del club más popular de la capital inglesa, ya recibió las órdenes...y también los 70 millones de la moneda británica.
Los cañones que descansan inactivos en las afueras del Estadio de Emiratos, apuntaron primero a Gonzalo Higuaín, el popular "Pipita", cuando se enteraron que el argentino estaba deshojando la margarita con un "me quedo" o "me voy" del Real Madrid. El entrenador galo ofreció por él 23 millones de libras. Florentino Pérez, el viejo zorro merengue, dijo "No, por tan poco no va, aumenten la oferta".
Y entonces a don Arsene, el mismo cuyo nombre de pila posee casi todas las letras del club al que ha entrenado durante 16 años, se le prendió la lamparita. Las declaraciones habían llegado cruzando raudamente el Atlántico. Su jugador favorito se quería ir de Liverpool. Había escuchado bien? Sí, pero el tema era la persecución de la prensa inglesa, el hostigamiento, el sufrimiento de la familia del futbolista...y el interés de Real Madrid. "No, no te afiles que no es para vos", se dijo a sí mismo.
Pero igual decidió esperar, no claudicó del todo. Agazapado, expectante, atento, viejo zorro del fútbol el también, sabiendo que en este negocio las cosas a veces pegan vueltas de carnero que no se ven ni en el circo. Y las ondas trajeron nuevas palabras, otra vez desde Uruguay y luego desde distintos puntos de Brasil, donde el representativo nacional donde brilla su candidato disputaba con singular éxito la Copa de las Confederaciones. Ahora el personaje hablaba de jugar la archi famosa Champions League, de su frustración porque su equipo no había conseguido el ticket para disputarla.
Entonces se decidió, porque qué podía perder? Fue hasta el Estadio, cargó uno de los cañones con una bala de 30 millones de libras, apuntó con cuidado hacia el norte del país y como donde Mr. Arsene donde pone el ojo pone la bala, la oferta cayó en el círculo central del Estadio de Anfield Road, en Liverpool. Y sí, fue un verdadero cañonazo. Todo tembló, también la banca de apuestas. Claro, la bandera blanca de la rendición no apareció. En su lugar el espigado francés se encontró con una resistencia feroz del ejército rojo.
Pero Monsieur Wenger ya lo tenía previsto, estaba todo calculado. El "No" ya lo tenía asumido, casi incorporado. Siempre supo que esa no era la cifra, así que esperó un par de semanas para situarse detrás de otro cañón en las afueras de Emiratos. Esta vez la bala pesaba 35 millones en lugar de 30. Alguien lo había visto subir por la rampa de circunvalación del nuevo Estadio "Gunner", pero a don Arsene no le importó. No perdió su aspostura y menos aún su compostura. Simplemente dejó la gran bala dentro del cañon pero no la lanzó. Decidió aguardar unos días más antes de disparar, pero se dice que lo hará muy pronto. En Jakarta, mientras transcurre la pre-temporada de Arsenal, alguien osó preguntarle al técnico por su "pingo". "Sshhh, el periódo de pases es momento de alta confidencialidad y secretismo", fue la respuesta que recibió. Enseguida Monsieur Wenger ensayó la mejor de sus sonrisas.
Aparecerá esta vez la bandera blanca en la ciudad de los Beatles o seguirá Mr. Wenger encontrando enconada resistencia desde las filas de los "Reds"? Mmmmm...no es recomendable perderse el próximo capítulo, simplemente porque puede ser el último. Y nadie querrá quedarse sin saber qué pasará con el futuro de Luis Suárez.
Nueva temporada, nueva política para los "Gunners". La determinación es verídica. La suma es el cheque que está guardado en uno de los cajones del despacho de Arsene Wenger en la sede de Emiratos, al norte de Londres. Las palabras son inventadas, pero cualquier similitud de ellas con la realidad, NO es mera coincidencia. El legendario técnico francés del club más popular de la capital inglesa, ya recibió las órdenes...y también los 70 millones de la moneda británica.
Los cañones que descansan inactivos en las afueras del Estadio de Emiratos, apuntaron primero a Gonzalo Higuaín, el popular "Pipita", cuando se enteraron que el argentino estaba deshojando la margarita con un "me quedo" o "me voy" del Real Madrid. El entrenador galo ofreció por él 23 millones de libras. Florentino Pérez, el viejo zorro merengue, dijo "No, por tan poco no va, aumenten la oferta".
Y entonces a don Arsene, el mismo cuyo nombre de pila posee casi todas las letras del club al que ha entrenado durante 16 años, se le prendió la lamparita. Las declaraciones habían llegado cruzando raudamente el Atlántico. Su jugador favorito se quería ir de Liverpool. Había escuchado bien? Sí, pero el tema era la persecución de la prensa inglesa, el hostigamiento, el sufrimiento de la familia del futbolista...y el interés de Real Madrid. "No, no te afiles que no es para vos", se dijo a sí mismo.
Pero igual decidió esperar, no claudicó del todo. Agazapado, expectante, atento, viejo zorro del fútbol el también, sabiendo que en este negocio las cosas a veces pegan vueltas de carnero que no se ven ni en el circo. Y las ondas trajeron nuevas palabras, otra vez desde Uruguay y luego desde distintos puntos de Brasil, donde el representativo nacional donde brilla su candidato disputaba con singular éxito la Copa de las Confederaciones. Ahora el personaje hablaba de jugar la archi famosa Champions League, de su frustración porque su equipo no había conseguido el ticket para disputarla.
Entonces se decidió, porque qué podía perder? Fue hasta el Estadio, cargó uno de los cañones con una bala de 30 millones de libras, apuntó con cuidado hacia el norte del país y como donde Mr. Arsene donde pone el ojo pone la bala, la oferta cayó en el círculo central del Estadio de Anfield Road, en Liverpool. Y sí, fue un verdadero cañonazo. Todo tembló, también la banca de apuestas. Claro, la bandera blanca de la rendición no apareció. En su lugar el espigado francés se encontró con una resistencia feroz del ejército rojo.
Pero Monsieur Wenger ya lo tenía previsto, estaba todo calculado. El "No" ya lo tenía asumido, casi incorporado. Siempre supo que esa no era la cifra, así que esperó un par de semanas para situarse detrás de otro cañón en las afueras de Emiratos. Esta vez la bala pesaba 35 millones en lugar de 30. Alguien lo había visto subir por la rampa de circunvalación del nuevo Estadio "Gunner", pero a don Arsene no le importó. No perdió su aspostura y menos aún su compostura. Simplemente dejó la gran bala dentro del cañon pero no la lanzó. Decidió aguardar unos días más antes de disparar, pero se dice que lo hará muy pronto. En Jakarta, mientras transcurre la pre-temporada de Arsenal, alguien osó preguntarle al técnico por su "pingo". "Sshhh, el periódo de pases es momento de alta confidencialidad y secretismo", fue la respuesta que recibió. Enseguida Monsieur Wenger ensayó la mejor de sus sonrisas.
Aparecerá esta vez la bandera blanca en la ciudad de los Beatles o seguirá Mr. Wenger encontrando enconada resistencia desde las filas de los "Reds"? Mmmmm...no es recomendable perderse el próximo capítulo, simplemente porque puede ser el último. Y nadie querrá quedarse sin saber qué pasará con el futuro de Luis Suárez.
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