Anochecer de un día agitado

Lunes de novela. Se termina julio pero los teleteatros están en plena ebullición.
Bueno, son las reglas del juego de un período de pases muy especial para algunos elegidos del aula del Maestro.
Al comienzo del día todo pintaba para que la "Saga Suárez-Bale-Real Madrid-Liverpool-Arsenal" se robara toda la audiencia. La inminencia del final flotaba junto con los nubarrones del hoy encapotado cielo británico. Los "merengues" han sufrido -y mucho- a Mr. Daniel Levy, el mandamás del Tottenham Hotspur, cuando poco tiempo atrás tuvieron que poner toda la carne en el asador para llevarse al mediocampista croata Luka Modric. Ahora intentaron ofrecer al portugués Favio Coentrao y al argentino Angel Di María, además de 40 millones de libras por el encumbrado Gareth Bale, galardonado como el mejor jugador de la última Premier League.
Florentino Pérez, el super hombre merengue, sabía la respuesta de antemano: "No corre amigazo, sólo cash, mucho cash y muy pesado: 84 millones de libras". Son los mismos que, de ser abonados por el gigante ibérico en las próximas horas, harán volar como una pluma el liderazgo de Edison Cavani como el futbolista más caro hasta ahora en el presente período de pases europeo.
Y mientras en eso están, el zorro de don Florentino ya le avisó a Pere Guardiola, el hermano de Pep, el mismo que representa a Luis Suarez, que si esta vez no puede doblar a Daniel Levy, irá por el "Lucho" a como dé lugar. Claro, es uno o el otro, los medios ingleses aclaran muy enfáticamente que la "pasta" hispana no da para los dos, bueno fuera...
Y cuando parecía que la jornada se conformaba con semejante hormiguero, resultó que el "Cholo" Simeone, el mismo que en sus buenas épocas se jactaba de jugar con el cuchillo entre los dientes, quiere al popular "Mota" Gargano para que aplique idénticos métodos defendiendo al Atlético Madrid. Dicen las malas lenguas que el "Cholo" no perdió el tiempo y ya lo pidió a los directivos del Calderon, mientras tomaba el sol a orillas del Manzanares.
En medio de semejante revuelo y casi como de la nada, a la hora del té subió al tapete el nombre de Diego Lugano. Así se supo que en enero último, cuando el París Saint Germain prácticamente le plantó en su cara los papeles del préstamo inminente, el Málaga tuvo que pelear a muerte por el "canario". Su adversario en aquel momento fue el Queens Park Rangers, por entonces aún en la Premier League, ansioso de reforzar una defensa frágil, tanto que al final el descenso terminó tragándoselo junto con sus ilusiones de clasificar a la Europa League, objetivo inicial de los del oeste de Londres, cuando a principios de la temporada 2012-2013 se habían reforzado casi inusualmente para un club de categoría media-baja.
Como quedó claro, el andaluz se llevó al capitán celeste aunque luego, al final de la temporada, lo retornó al campeón francés. Hoy, justo a la hora del té, resurgió de entre las cenizas el QPR. Parece que Harry Redknapp, de reconocida trayectoria en el fútbol de estas tierras y sorpresivamente marginado por la Football Asociation a la hora de designar el técnico de la selección inglesa, no está dispuesto a arriesgar el objetivo del retorno inmediato a la Premier y como medida imprescindible, está enfrascado de lleno en reforzar su defensa. El carismático Harry quiere a un experiente que ordene y mande todo por ahí atrás.
Y entonces, para coronar la jornada, apareció en el menú la "información a la parisien". Leonardo, quien ya se va pero no todavía, anunciaba la inminente salida del PSG de Diego Lugano. La fuente daba el nombre del interesado: sorpresivamente era otro. Según Europe Mercato, en francés y con el escudo del PSG al tope del informe, el líder celeste estaría sellando el martes su vinculación con el West Bromwich Albion de la Premier League, un club que se situó en una honrosa posición de media tabla en la última temporada.
Fue la frutilla sobre la torta a la hora del té...en el anochecer de un día agitado.